Desde mi doble precariedad de aficionado del análisis político vs. un profesional, y de observador lejano y sin compromiso (un mero bloguero del mero Perú) propongo una lectura distinta: un triunfo histórico, por razones más bien tradicionales salvo por la campaña, que si es histórica, que se las arreglo para crear una percepción, ante los activistas y los observadores profesionales no académicos, de ser histórica: un movimiento, un mandato.
(¿vieron la finísima manera de referirme a los periodistas que acabo de usar?)
La cosa es simple: para grupos específicos de la población de los EEUU (afroamericanos, jóvenes universitarios, izquierdistas, fundamentalmente) los elementos no coyunturales fueron significativos: la necesidad de cambio más allá de la gestión financiera, la urgencia de sentirse representados, el abandono del cinismo como característica fundamental de la relación con lo político. Este grupo fue identificado por Obama pero sobre todo, dialogó con la campaña a través de herramientas tecnológicas precisas, que si bien fueron utilizadas el 2004 por Howard Dean, fueron aprovechadas de manera espléndida y masiva por la campaña de Obama. Unido a esto la habilidad política del estratega maestro, David Axelrod, se unieron para crear una combinación perfecta: un mensaje genérico atractivo para muchos, con un mensajero igualmente atractivo, que se re-semantizaba para cada grupo de una manera perfecta, mediante el simple método de evitar decir cosas específicas.
La campaña de Obama logro convertirse, a los ojos de muchos, en estructuralmente novedosa, con lo que el grupo de votantes fue más motivado a las urnas y eventualmente dio la impresión que su cantidad era indetenible: "the one", como le puso Oprah Winfrey, el mesías como le hacían bromas en el Daily Show. Recordemos que en el sistema de EEUU se necesita convencer a la base para lograr dos cosas: que aporten dinero para la campaña, y que vayan a votar. Motivando a la base, haciéndola crecer mediante el uso de una serie de nuevos medios para alcanzar con diversidad y flexibilidad a la mayor cantidad posible de gente: es fue la fórmula de Obama, y hay yace la originalidad, la novedad estructural de su campaña.
Consagrando la combinación de los pequeños avances de Dean el 2004 y el "microtargeting" de Karl Rove en el 2000 y 2004, Obama ha creado un escenario nuevo. Como dice este estudio, si bien el número de votantes no fue finalmente mucho más grande que lo que fue el 2004, la cantidad de votantes demócratas y de votantes jóvenes sí fue significativamente mayor. ¿Resultado? Un escenario electoral que a la distancia no parece especialmente distinto, pero que apunta a una manera muy diferente de hacer política. Como esta anécdota relatada en Newsweek lo revela:
In the meantime, there were indications of a great storm brewing. At the end of August, as Hurricane Gustav threatened the coast of Texas, the Obama campaign called the Red Cross to say it would be routing donations to it via the Red Cross home page. Get your servers ready—our guys can be pretty nuts, Team Obama said. Sure, sure, whatever, the Red Cross responded. We've been through 9/11, Katrina, we can handle it. The surge of Obama dollars crashed the Red Cross Web site in less than 15 minutes.¿Lecciones para el Perú? No creo que muchas, y no porque no tengamos los niveles de acceso que tienen en EEUU: si bien la primera parada es el acceso, la segunda es la estrategia comunicacional, que depende de mensajes precisos que permitan exacerbar el activismo. Aquellos que ya son exacerbadamente activistas en nuestro país no van a dejar de hacer lo contrario que hizo Obama: trasladar de manera tenue y efímera sus propias expectativas de acción al mensaje del candidato. De alguna manera es la lección de Fujimori, Toledo y Humala: los votantes deciden que el tenor de la campaña refleja sus propias expectativas / frustraciones / escepticismos, antes que sea la campaña la que cree mensajes en donde un mensaje general encuentra cómo darle un espacio más grande a preocupaciones individuales. En una situación así, mientras menos claridad tenga el mensaje, mejor, y mientras menos oportunidades reales de intercambio de comunicación entre votantes y votados haya, mejor.
Y aquí queda. No más sobre las elecciones de EEUU, salvo cuando publique estas ideas en un artículo más largo, cosa que contaré aquí. Para terminar, algunos enlaces interesantes:
- Charles Krauthammer, un comentarista conservador de los que justifican la tortura y demás, hace una autopsia
- ¿La cuarta república? Algo exagerado quizá, pero es el tenor de este artículo en la muy izquierdosa Salon.
- The Onion lo dice mejor que nadie.
- El Guardian dice lo mismo que yo pero en inglés...
- El Flickr de Obama tiene unas fotos bien interesantes por ser espontáneas, y tan mal tomadas como las que habitualmente adornan Flickr.
- Pero lo más importante al final: en la tradición que comenzaron hace varias elecciones, Newsweek publica su reportaje fly-on-the-wall de la campaña, impecable y buenísimo.
2 comentarios:
Mi estimado:
yo tampoco voy a pelear, porque tampoco veo que pensemos tan diferente en esto.
De acuerdo con que entre jóvenes, afroamericanos y otros la ventaja de Obama sobre McCain fue muy grande, y que la manera de hacer campaña tuvo elementos "históricos". Sin embargo, me parece que esto se relativiza al ver los "grandes números".
"Barack Obama won 96% of African Americans, 68% of Latinos, 64% of Asians, and 44% of whites. In 2004, Kerry won 89% of African Americans, 55% of Latinos, 56% of Asians, and 41% of whites"... "The gap between young and old has increased–a lot", pero "there was no massive turnout among young voters. According to the exit polls, 18% of the voters this time were under 30, as compared to 17% of voters in 2004". Datos tomados de:
http://redbluerichpoor.com/blog/?p=206
Si sumamos los datos que menciono en mi blog, con los resultados de todos los estados, se refuerza la impresión de un "cambio de marea" general, antes que un cambio en la demografía o la geografía electoral democrata-republicano...
Para seguirla pensando, yo no soy experto tampoco en american politics...
Martín, es cierto que estamos fundamentalmente de acuerdo. Hay un cambio mínimo en la demografía pero mucha intensidad de sentimiento político en aquellos que votaron por Obama. En un país como EEUU, probablemente eso sea suficiente. Lo interesante es la manera como se usó tanto los medios masivos como los nuevos medios para crear una percepción de avalancha completamente distinta a la realidad.
Sobre lo mismo:
http://thecaucus.blogs.nytimes.com/2008/11/09/democrats-have-gop-to-thank-at-least-in-part/
http://www.nytimes.com/2008/11/10/business/media/10carr.html?ref=politics
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